A principios de semana tuvimos una reunión con Tere, la coordinadora del Practicum en el IES Lloixa, en la que se interesó por nuestra adaptación en el centro. La verdad es que hasta el momento nos sentimos muy arropados.
La semana, además, empezó un poco convulsa por la posible huelga de finales de semana. Aunque mi tutora (Raquel) tenía previsto un examen para el miércoles, finalmente será el lunes de la próxima semana, con lo que se adelantó mi estreno como profesor, sobre el que hablaré más adelante.
El martes, aunque no durante la clase sino en los pasillos, pude ver a Raquel resolviendo un conflicto, y la verdad es que aluciné. Un toque firme en el hombro acompañado de un "sch" bastó para solventar el problema. Tengo mucho que aprender, desde luego. Además, tuvimos una reunión con Rosario Salazar, que nos habló de las funciones del Departamento de Orientación en el centro.
Y el miércoles llegó el día. Por primera vez me tuve que enfrentar a los alumnos. Y la verdad es que yo mismo me sorprendí de que no llegué a ponerme nervioso. Me apoyé en el Geogebra, en un vídeo de Youtube bastante impactante, e intenté utilizar un lenguaje cercano. Al día siguiente, el jueves, me quedé solo ante el peligro. Raquel tenía reunión con un inspector de Educación y tuve que impartir la clase sin su supervisión. Los alumnos respondieron estupendamente, manteniendo una actitud muy buena y participando activamente en la clase. Cada día me encuentro más a gusto con ellos.
Terminamos la semana con una tutoría con el grupo de 3º A, en la que vimos parte de Una mente maravillosa, basada en la vida del matemático John Nash. Además, en la hora de guardia, me quedé al cargo de un grupo de 4º de ESO. Durante la hora, estuvieron trabajando y posteriormente tuvimos un pequeño debate sobre los estudios, profesores, su futuro...El resto de clases transcurrieron con normalidad, corrigiendo los ejercicios propuestos la clase anterior y continuando con el temario.